En este 6 de diciembre de 2024 constatamos más que nunca el deterioro de nuestro sistema democrático causado por una clase política alejada absolutamente de las grandes cuestiones que afectan a España y que han optado claramente por la guerra de relatos respectivos por encima de cualquier otra visión. A cada titular sobre un nuevo escándalo en el ámbito de la gestión de lo público sucede una inmediata reacción para desviar la atención, buscar otro foco de polémica y evitar con ello la asunción de responsabilidades que, desde un punto de vista objetivo, debería darse siempre que se plantea una pregunta.

Volvemos por ello a lo que consideramos el alma misma de la Constitución que este 6 de diciembre una vez más conmemoramos con la convicción de ser un marco de estabilidad social plenamente vigente con el transcurso de estos cuarenta y seis años ya de historia constitucional española contemporánea. El alma que se encierra en las breves líneas de su preámbulo y que, en todo caso, reivindicamos desde una sociedad civil que mantiene su voluntad firme de garantizar la convivencia democrática de todos los españoles dentro de la propia Constitución y de las leyes, cuando desde algunos sectores de la escena política es constante el llamamiento al enfrentamiento y a la exclusión de quien piensa distinto. Que sigue exigiendo el respeto al imperio de la ley como expresión de la voluntad democrática de un pueblo cuando vemos ataques constantes desde intereses particulares o partidistas a la misma y a quienes tienen la función de aplicarla y hacerla aplicar. Que se reafirma en la defensa de la diversidad de nuestro país y en la riqueza que esta nos aporta cuando asistimos a los intentos de uniformarnos en uno u otro sentido o de dividirnos artificialmente despreciando todo lo que nos ha hecho caminar juntos desde hace siglos.

Desde Nexo llamamos por ello de nuevo a una reflexión profunda sobre lo que como sociedad queremos ser y sobre lo que cada persona puede contribuir a ello. Y a hacerlo con una mirada tan crítica como constructiva desde nuestro texto constitucional, lugar de encuentro y desarrollo de cuantas iniciativas son legítimas de ser planteadas desde la tolerancia y a través del debate.

Reivindicamos hoy una vez más que nuestra Constitución vive, lo que no impide que pueda y deba ser sometida a ese permanente escrutinio y reforma que exigen el devenir del tiempo y la evolución de la sociedad a la que sirve. Y en ese sentido planteamos el necesario fortalecimiento de esos valores de la igualdad y la solidaridad territorial hoy tan puestos en cuestión con propuestas políticas que vuelven a primar la singularidad en la aplicación y gestión de recursos públicos y en la financiación de aquellos servicios que deben garantizar desde las Administraciones un trato equitativo de todos los ciudadanos más allá de donde vivan. Frente a modelos de financiación territorial particulares basados en otros momentos históricos muy diferentes a la sociedad de la España actual, y frente a los intereses puestos de manifiesto por generar nuevas diferencias, apostamos por avanzar hacia un marco europeo armonizado y más igualitario para todos los ciudadanos de la Unión Europea, sin privilegios ni desigualdades, ni en Europa ni en España.

Por una Constitución que pervive con cimientos sólidos para seguir construyendo esa casa común en la que cabemos todos.

Feliz Día de la Constitución.

Si quieres hacer algún comentario o reflexión sobre este contenido envíanos un correo electrónico a info@nexoplataforma.com poniendo el título de este contenido en el asunto.

Newsletter Nexo

Recibe todas nuestras noticias directamente en tu email